Chistes de suegras
-¿Por cuánto me compras a mi suegra? – ¿Tu suegra? Por nada. – De acuerdo, trato hecho.
-Pepe, te veo preocupado. – Es que por poco atropello a mi suegra. – ¿Te fallaron los frenos? – No, no, el acelerador.
-Dos amigos: – Si no fuera por el bigote, serias igualito a mi suegra. – Pero, si yo no llevo bigote… – Pero ella sí.
-Un hombre encuentra un Genio, éste le dice que puede tener lo que quiera, pero que su suegra va a recibir el doble de lo que él pida. El hombre piensa un instante, y pide: – Quiero un millón de dólares y que me golpeen hasta dejarme medio muerto.
-Una mujer le pregunta al marido: – Pepe, ¿Que haces tan pronto en casa? -Que se ha caído mi compañero del andamio y se ha matado. -¡Pobre familia!. Menos mal que por lo menos el seguro de la empresa les va a pagar quinientos mil Euros. Y la suegra se mete y dice: – Y tu ¿Donde andabas que no estabas trabajando con tu compañero?
-Un hombre fue al entierro de su suegra bien borracho. Esa noche volvió al cementerio todavía mas borracho a buscar la tumba de su suegra. Al rato escuchó una voz que provenía de la tumba de la vieja y vio una mano que hacia un esfuerzo para salir de la tierra, la voz decía – !!!Sáquenme de aquí … sáquenme que estoy viva ¡¡¡ El hombre, borracho y muy nervioso, pisaba la mano de la vieja con el pie y le decía – ¿Viva? .. !! lo que está es mal enterrada ¡¡¡
-Un hombre habla con su esposa: A mi me gustaría que mi suegra fuera una estrella. – ¿Si? Para que los llevase a Hollywood? -No, para que estuviese a 3000 años luz.
-Un hombre va al psicólogo y le dice: – ¡Doctor me he peleado con mi suegra! Y la vieja me dijo que no me volvería a hablar en un mes. – ¡Pero hombre!¿Eso es una gran ventaja no? – ¡Para mi no! ¡Es que el plazo se vence hoy!.
-Se encuentran dos amigos y le pregunta uno al otro: – Oye Juanjo ¿Como te va con tu suegra?. A lo que Pepe responde: – Pues te cuento, ¡Me trata como a un dios!. Juancho entonces pregunta – Eres el primero que oigo hablar tan bien de su suegra! Y ¿Como que te trata como a un dios?. Y Pepe le explica: – Sí, me trata como a un dios. -¡Sabe que existo, pero no me puede ver’.
-¡Amor mio!…¡Amor mio!….¡Amor mio!… Hace media hora que se cayó tu madre de la terraza. – Y ¿Por qué no me avisastes antes? – Es que no podía hablar de la risa.
-Auxilioooo…, socorrooooo….., Llamen a los bomberooos… ¡Que se quema nuestra casaaa!,- grito la mujer – – ¡Shhhhhhh!… silencio amor mio, no hagas ruido… que vas a despertar a tu madre.
-Suegra, ¿Usted cree en la reencarnación? – Supongo que sí. – Y dígame, si usted se muere, ¿En qué animal le gustaría reencarnarse? – Pues a mí siempre me han gustado las serpientes. – ¡No vale repetir, no vale repetir!
un comentario
Muy buenos!